Ya
¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé! ¡Terminé!
Bueno: en realidad tengo que confesar que he disfrutado como una enana. A pesar del sometimiento a la ley de la silla (sesiones de ocho horas de lectura con intermedio para comer), este encierro de dos semanas ha acabado siendo una gozada: ¡Fortunata y Jacinta en manos de Stephen Gilman es sencillamente apoteósica!
Bueno: en realidad tengo que confesar que he disfrutado como una enana. A pesar del sometimiento a la ley de la silla (sesiones de ocho horas de lectura con intermedio para comer), este encierro de dos semanas ha acabado siendo una gozada: ¡Fortunata y Jacinta en manos de Stephen Gilman es sencillamente apoteósica!
1 comentario
Noelia -
¡Felicidades!!!!!!