Blogia
aunqueseaceniza

¡¡¡¡ ... !!!!

--Barcelona vive demasiado preocupada por conservar intacto su alto nivel de calidad de vida.

--Su comodidad mental, querrá decir.

--Hace tiempo que he llegado a la conclusión de que Barcelona no participa como debiera de las incomodidades del siglo XXI. Y ello acabará perjudicándole. Lo que la burguesía y la menestralía supieron hacer en el tránsito del siglo XIX al XX --arriesgar, jugársela, verse las caras con una realidad social difícil e incluso violenta, construir nuevas dimensiones...-- me temo que no se está haciendo en el tránsito del siglo XX al XXI. No existe la misma ambición. Me sabe mal decirlo, pero esta es mi conclusión: tras haber conquistado una gran calidad de vida, Barcelona vive atenazada. Tiene miedo al riesgo y a la intemperie.

De La Vanguardia (11-II-2007): Joan Clos, espíritu inquieto y transgresor, hecho a los inconvenientes y las incertidumbres de la vida aventurera, responde a las preguntas de Enric Juliana.

(Las mañanas que bajo a trabajar desde Gracia paso por una Caixa en cuyo portal duerme invariablemente un bulto bajo una manta. No dentro, no en el cajero. A la intemperie, ciudadano constructor de nuevas dimensiones.)

0 comentarios